RECUBRIMIENTO DE ZINC-NÍQUEL
El recubrimiento electrolítico de Zn-Ni consiste en la deposición de una aleación de zinc y níquel, con una concentración de níquel de entre 6–16 %.
Es un recubrimiento medianamente duro, pudiendo alcanzar los 450 HV. Este recubrimiento aporta una alta resistencia a la corrosión (más de 750 h en cámara de niebla salina) con espesores de entre 10 y 18 micras.
Otra de sus funciones es la de evitar el efecto pila galvánica cuando acero y aluminio han de montarse juntos, evitando de esta manera la oxidación acelerada del aluminio.
También se usa como capa mordiente para la aplicación de imprimación y pintura.